Hay millones de máquinas de escribir en el mundo. Prácticamente su uso es residual, y el problema de muchas de ellas, es que se dejaron de utilizar cuando se averiaron.
Había una en casa de mis padres. Es totalmente mecánica. El problema que tenía era que una tecla no podía volver a su posición. Estaba trabada entre la guía dónde impacta y su lugar natural. Digamos que a medio camino entre su sitio de descanso y el de impacto en la hoja.
La verdad es que no encontré ninguna ayuda en Internet. Tampoco he encontrado reparadores de máquinas a mi alrededor. Además con los precios tan bajos que tienen en el mercado de segunda mano, cualquier reparación saldría más cara que una funcionando.
Material utilizado en la reparación:
- Un destornillador (realmente no es necesario).
- Un par de alicates planos (uno finito y otro más fuertote).
Bueno, la forma de arreglarla ha sido totalmente intuitiva. Lo primero que hice fue quitarle la tapita negra de arriba, y quitarle los cuatro tornillos que sujetan el armazón lateral de color plateado. En las fotos veréis que no está ese armazón. Luego me di cuenta de que no hacía falta quitarlo para nada.
La máquina sin el embellecedor lateral:
La reparación de verdad empieza cuando le damos la vuelta a la máquina de escribir y le quitamos la tapa de abajo. En mi máquina la tapa está sujeta por la presión de dos gomas. Tuve que hacer bastante fuerza con el destornillador para soltarla. Intentar no romper las gomas.
Y así, entre los tiradores de la teclas, a simple vista ya se veía el tema. Tenemos una pieza metálica totalmente deformada.
Ahora empieza la reparación de verdad. Con mucho cuidado empezamos a tirar de alicates. Lo delicado con el pequeño. Para la fuerza empleamos los grandes. Con paciencia hasta dejarlo como el resto:
Y llegó la hora de la verdad. Le damos la vuelta otra vez, y probamos a escribir. Ha quedado como nueva.
Cuando me pongo a escribir más texto, veo que todavía
no está completamente reparada. La letra "T" se queda enganchada en la guía dónde impacta con el papel, y no vuelve. Bueno, esta reparación es más sencilla. Ya sabemos que "en las tripas" lo hemos dejado todo bien. El problema es que la inclinación del cabezal de la pieza (dónde está el relieve de la letra), no es la correcta. Pongo la pieza en su lugar de "descanso" y comparo la inclinación del cabezal con el de las piezas adyacentes. Cojo el alicate grande y corrijo un poco. Ahora la pieza no se queda enganchada.
Ahora sí puede decirse que la máquina está como nueva.